motivo fue nuestro reencuentro con
nuestro Profesor Marquina, en ocasión de la Misa por su salud, hoy martes 15 de
noviembre, conforme lo habíamos anunciado el día de ayer, en la Capilla del
Hospital Edgardo Rebagliati.
Eran las 5PM, cuando un grupo de
discípulos del maestro, Felipe Marquina Pisconte, fuimos a su encuentro para esta cita a fin de
expresarle nuestros saludos y trasmitirle toda
nuestra energía positiva. En esta ocasión, quienes nos hicimos presentes
fuimos, en orden alfabético:
Abelardo Zambrano Toscano (Promoción
1969)
Alfredo Machado Aguilar (Promoción
1970)
Carlos Caballero Cabanillas (Promoción
1970)
Carlos V. Alva Díaz (Promoción 1969)
Emilio E. León Flores (Promoción 1969)
Fernando L. Carrillo Venegas (Promoción
1969)
Jorge B. Fernández Falcón (Promoción
1971)
José Llerena Silva (Promoción 1969)
Luís Alberto Lingán Paredes (Promoción
1969)
Miguel Ángel Moreno Nanahuanca
(Promoción 1984)
Víctor Manuel Espada Yuffra (Promoción
1969)
Walter Ayala Murga (Promoción 1969)
Como era de considerarse, el Profesor
Marquina debía ser retirado de su habitación mediante una orden y que, para
esto, el socio y dirigente, Dr. Espada Yuffra fue el encargado de la gestión
quién, tras conseguir una silla de ruedas para el traslado del profesor, se
hicieron presentes en el oratorio y lugar de culto de la Capilla del Hospital
Rebagliati, en momentos que el sacerdote ya impartía el desarrollo de la misa
en favor del profesor. Durante la ceremonia, los presentes guardaron saludable
reverencia, y tanto más por la calidad del mensaje que el sacerdote dio tomando
una cita del Evangelio según el Evangelista San Lucas, sobre el recaudador de
impuestos Zaqueo (San Lucas 19:1-10), para tratar acrca del Perdón.
Al término de la misa, y tras oficiar
el sacerdote el sacramento de la eucaristía entre quienes asintieron participar
del rito acercándose hacia el altar, el Profesor Marquina fue nuevamente
conducido por el Dr. Espada Yuffra, hacia uno de los lados de la capilla para,
y como era de esperarse, recibir el saludo afectuoso de todos quienes estuvimos
en tan importante ceremonia por la salud del distinguido profesor. En efecto,
el Profesor Marquina sufre de cierto nivel de ceguera y, en realidad, le es
imposible distinguir a cada quién pero, por fortuna, nos alegró saber que él
podía distinguir a muchos de sus ex alumnos por el solo oírles hablar. Fueron
gratas las expresiones de Fernando Carrillo, ex presidente de la asociación
quién, obstante lo delicado de su salud, se empeñó por estar allí para saludar
de cerca al profesor y, no solo eso, como es propio de él, para hacer las
bromas que le son característicos siempre en el nivel que la ocasión requería,
por cierto. Al término de las expresiones de quienes estábamos allí, algunos
con tan solo un “¿Cómo está profesor?”, quizá queriendo decir mucho más, porque
había emoción en lo que decíamos (el editor de la presente nota solo atinó a
tomar la mano del profesor, y decirle un “¡Que le vaya bien, profesor!”), el
Profesor Marquina agradeció la presencia y el gesto de la misa que se organizó
a su favor, confiando que saldrá bien de la operación a que será intervenido
este viernes 18 por, según sus palabras, “por una oración de [sus] ex alumnos”.
Estuvo, igualmente, presente una señorita nieta del profesor quién, acercándose
a él con ternura, le platicó de detalles de sus estudios como para contentar al
ilustre maestro. En determinado momento de nuestro coloquio con el profesor,
supimos por él que tuvo un infarto, lo que obligó a posponer su operación,
inicialmente programada para el miércoles 16, para el viernes 18.
Debemos
mencionar que, ex alumnos que se disculparon por no haber podido asistir,
fueron conectados, a través del celular del Dr. Víctor Espada, con el Profesor
Marquina, como Carmen Villanueva Cruz (Promoción 1983) y nuestros promocionales
Walter E. Canseco Francia y Raúl E. Gonzáles Vargas, quienes sostuvieron emotivos
diálogos telefónicamente con el profesor. Alfredo Machado le obsequió una estampita,
una sencilla pero clásica costumbre en estos trances.
Luís
Alberto Lingán Paredes, quién dio alcance al Profesor Marquina quién, a su vez,
era conducido había su habitación (Cama 39, del piso 11, Pabellón B, del
Hospital Nacional Edgardo Rebagliati), nos refiere que cuando él se fue a
despedir, el profesor le dijo: “Agradezco la alegría que me han proporcionado
todos los muchachos al sentir el aprecio que tienen por mí”; lo que constamos
aquí que usted lo reciba del vuestro profesor.
Salidos de la capilla y, tras
acordarlo, nos trasladamos al cafetín dentro de las instalaciones del referido
nosocomio donde degustamos un riquísimo lonche, ocasión que nos sirvió para
platicar amenamente. Durante la reunión conocimos, justamente por el Dr. Espada
Yuffra, que la operación está programada para este viernes 18.
Dejamos fotos de lo acontecido,
esperando que sean de ilustración para todos ustedes.
Cordialmente.
Comunicación y
RRPP
Asociación
Coronadina
Lima, martes 15
de noviembre de 2016
