A |
l iniciar la invasión a Ecuador de 1941, el teniente
Quiñones fue destacado al teatro de operaciones, integrando el XXI Escuadrón de
Caza del Agrupamiento Aéreo del Norte. Los pilotos asignados a este
Agrupamiento cumplían diversas funciones, entre ellas fotografiar el terreno de
los hechos y ubicar las posiciones del enemigo. Las divisiones peruanas,
apoyadas por su fuerza aérea, derrotaron a las tropas ecuatorianas a lo largo
de la frontera de Zarumilla, pero aún quedaban dos puntos fuertes que destruir,
los de Rancho Chico y Quebrada Seca, donde los ecuatorianos habían concentrado
escasa artillería antiaérea y colocado
“nidos” de ametralladoras.
Cap. FAP José Abelardo Quiñonez Gonzales |
Con la misión de silenciar las baterías ecuatorianas para abrir paso a las tropas peruanas, el 23 de julio de 1941, la 41.ª Escuadrilla (integrante del XXI Escuadrón de Caza) despegó de Tumbes, al mando del teniente comandante CAP Antonio Alberti e integrada por los tenientes CAP Fernando Paraud y José Quiñones y el alférez CAP Manuel Rivera, a bordo de sus aviones de caza North American NA-50. Quiñones había bautizado a su apreciado avión con el nombre de “Torito”.
Fotografía del vuelo invertido de José Quiñones, 21 de enero de 1939 |
Pocos minutos después de la partida ya estaban sobre el objetivo e iniciaron el bombardeo del puesto ecuatoriano de Quebrada Seca. Cuando el aparato pilotado por el teniente Quiñones efectuó por segunda vez el descenso para lanzar sus bombas, fue alcanzado por el fuego antiaéreo ecuatoriano. En vez de saltar del avión y utilizar su paracaídas, en cuyo uso era diestro, Quiñones enrumbó su avión hacia el blanco ecuatoriano, estrellándose, destruyendo las baterías enemigas y muriendo en el acto.
El 19 de octubre de 1941 (tres
meses después de su deceso), el coronel del Ejército de Ecuador Octavio A.
Ochoa, jefe de la IV Zona Militar, entregó a nombre de las Fuerzas Armadas
Ecuatorianas los restos mortales del héroe peruano, pronunciando las siguientes
palabras:
“Entrego a la Fuerza Aérea del
Perú los restos de quien supo honrar a su patria, a su pueblo y a su fuerza
armada. Mi pueblo [ecuatoriano] rinde homenaje al pueblo peruano, dignamente
encarnado en la figura heroica de José Abelardo Quiñones Gonzales.”
Sus restos mortales reposan en
los jardines de la Base aérea Las Palmas en Lima, cerca del también
célebre aviador Jorge Chávez.
Busto en honor del héroe, Cap. FAP José Abelardo Quiñones Gonzales |
Quiñones fue ascendido póstumamente a Capitán de la Fuerza Aérea del Perú y declarado Héroe Nacional del Perú por la Ley N.º 16126 del 10 de mayo de 1966.
En julio de 1991, con motivo del
50.º aniversario de su muerte y reconociendo nuevamente su heroísmo, el Banco Central de Reserva del Perú,
decidió que la imagen de Quiñones aparezca en los billetes de 10 Nuevos Soles.
En el diseño original de este billete, en la parte posterior aparecía una
representación del vuelo invertido que hizo el héroe en el día de su graduación
en la escuela de aviadores (en el segundo diseño, aparece la imagen de Machu Picchu, Cusco).
Asimismo, cada 23 de julio (día
de su inmolación) se conmemora el Día de la Fuerza Aérea del Perú.
El Congreso de la República del Perú le
otorgó a título póstumo el grado de Gran General del Aire del Perú a través de
la Ley N.º 29160 del 18 de diciembre de 2007.
El 15 de abril de 2014, el
Congreso aprobó dar al espacio aéreo peruano el nombre de «cielo de Quiñones»,
en homenaje a los 100 años del nacimiento del héroe.
En conmemoración del aniversario
número 100 de su nacimiento, el Banco Central de Reserva del Perú autoriza
la emisión de cinco mil piezas de plata de una nueva moneda de colección con la
imagen del capitán de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) y Gran General del Aire,
José Abelardo Quiñones, de valor nominal de un nuevo sol, a un costo de 10
nuevos soles.
Porción tomada del artículo “José Abelardo Quiñonez”, de Wikipedia.