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Pintura romántica de la llegada de Cristóbal
Colón a América (Dióscoro Puebla, 1862)
escubrimiento
de América es la denominación que recibe la llegada a América de una expedición
proveniente de Castilla dirigida por Cristóbal Colón por mandato de los Reyes
Católicos, Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón. Este acontecimiento
tuvo lugar el 12 de octubre de 1492. Colón había partido del Puerto de Palos
dos meses y nueve días antes y, tras cruzar el océano Atlántico, llegó a una
isla del continente americano, Guanahani, creyendo que había llegado a la
India. Este hecho fue uno de los momentos fundamentales de la historia
universal y representó un «descubrimiento», desde el punto de vista de los
habitantes de Afroeurasia, de territorios, poblaciones y culturas muy
diferentes de las propias. Desde el punto de vista de los nativos americanos
fue el «descubrimiento» de los habitantes de una región del mundo que
desconocían. Algunos autores, por lo tanto, han usado el término: «encuentro de
dos mundos» para indicar el contacto entre dos ramas de la Humanidad que habían
evolucionado independientemente desde el poblamiento de América
Varios
años después de la llegada de Colón a América, desde su tercer viaje, los
españoles se percataron de que el lugar al que habían llegado no era una isla
sino tierra firme, y que no estaba conectada al extremo oriental de Asia,
genéricamente llamado India, como se esperaba, sino que formaba un continente
nuevo. Esta región fue cartografiada, entre otros, por Américo Vespucio, cuyas
cartas, interpoladas, fueron recogidas por los eruditos de la Academia de los Vosgos
quienes, desde 1507, le dieron el nombre América, tomado del cartógrafo. En los
siglos posteriores España, seguida por Portugal, y en menor medida Inglaterra,
Francia, Países Bajos, Rusia, Suecia, Dinamarca-Noruega, entre otras potencias
europeas, compitieron por la exploración, conquista y colonización del
continente americano. También se introdujeron como esclavos a una cantidad
estimada en millones de personas desde el África colonial,2 lo cual llevó a
procesos de disolución y anomia de culturas milenarias, así como al surgimiento
de nuevas conformaciones étnicas, culturales y políticas.
Existe
otro uso controvertido respecto al significado del término «descubrimiento» que
alude a la llegada de la expedición de Colón a unas tierras que ya estaban pobladas,
y había sido ocupadas por los primeros seres humanos que llegaron al continente
hace aproximadamente 14 000 años, y, por otro lado, existen asentamientos
vikingos datados en el siglo X y ubicados en la isla de Terranova, en el
archipiélago Ártico Canadiense, aunque sin evidencias de contacto con los
nativos ni tampoco noticia de este hallazgo en Europa.
El
descubrimiento de América tuvo un enorme impacto en el mundo, especialmente a
partir de la conquista de América por parte de varios imperios europeos, que
establecieron la hegemonía mundial de Occidente. Se introdujo el conocimiento
indígena en arte e ingeniería, además de diferentes especies vegetales y
animales, como el caballo, especie introducida en el segundo viaje de Cristóbal
Colón, y que se encontraba extinto en América desde tiempos remotos.
Existe
una clara distinción entre el «acto mismo del descubrimiento», entendido como
la serie de viajes que hicieron navegantes españoles que llegaron a América y
el encuentro entre culturas, y el posterior proceso histórico conocido como la
conquista de América que los europeos realizaron a continuación.
Antecedentes
Unos
años antes del descubrimiento de América, los viajes marítimos portugueses a la
India bordeando la costa de África y siguiendo el derrotero hacia el este a
través del Océano Índico sirvieron como un estímulo para otros navegantes
europeos, que creían que era posible llegar a las regiones de Asia oriental
navegando hacia el oeste. Cristóbal Colón defendía la hipótesis de que el
diámetro de la Tierra era tan pequeño que se podía alcanzar Asia, navegando
desde Europa hacia poniente. En 1492 consiguió el apoyo y el patrocinio
económico de los reyes Isabel I y Fernando II de Castilla y Aragón, que le
autorizaron a organizar un viaje de exploración que lo condujo a islas y tierra
firme desconocidas para ellos, y que hoy conocemos como América...
Los
cuatro viajes de Colón
Cristóbal
Colón, en representación de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, reinos
españoles, realizó cuatro famosos viajes desde Europa a América en 1492, 1493,
1498 y 1502. En el primero de ellos llegó a América el 12 de octubre de 1492, a
una isla de las Bahamas llamada Guanahani, bautizada por la expedición como San
Salvador, también llamada actualmente como Isla Watling.
Los viajes de Colón
A
partir del segundo viaje de Colón, descubrimientos, conquista militar, e
invasión progresaron conjuntamente. Durante los veinte años que separan 1499 de
1519, cuando empezó la empresa de Fernando de Magallanes, tuvieron lugar los
llamados «viajes de descubrimiento y rescate» «viajes menores» o «viajes
andaluces», capitulados por la corona española con empresarios privados
quebrando el discutido monopolio colombino. En el primero de estos participó
Américo Vespucio, a quien se ha atribuido ser el primer europeo en proponer que
las tierras a las que Colón había llegado no eran en realidad parte de Asia,
sino de un continente desconocido para los europeos y de cuyo nombre de pila
deriva el nombre de «América».
Primer
viaje
Artículo principal: Primer viaje de Colón
En su primer viaje (1492-1493) Colón llegó a varias islas del Caribe: Guanahaní (a la que bautizaron como San Salvador), Cuba (Juana) y Santo Domingo (La Española). En La Española chocó su mejor barco, la Santa María, y con su madera se construyó un fortín llamado La Navidad. Colón regresó a España en la carabela La Niña.
Los
Reyes Católicos, particularmente la reina Isabel I de Castilla, decidieron
financiar a Cristóbal Colón en su proyecto de llegar a Asia por el oeste,
atravesando la mar océana. El 17 de abril de 1492, Colón firmó con los reyes
las Capitulaciones de Santa Fe, documentos por los cuales se autorizó, sin
financiar, la expedición de Cristóbal Colón a las Indias por el mar hacia
occidente. Además se le concedieron a Colón una serie de prebendas y títulos,
entre ellos: Almirante, Gobernador, Virrey y el 10 % de las riquezas. También
se firmaron varias provisiones y cédulas para que ayudasen a Colón en aquellas
villas y puertos de mar a las que se dirigía. Una provisión fue dirigida a la villa
de Palos de la Frontera por una sanción impuesta a algunos de los vecinos de
esta villa.
Iglesia de San Jorge Mártir
de Palos de la Frontera.
El
23 de mayo de 1492, a las puertas de la iglesia de San Jorge de Palos de la
Frontera, en presencia de Cristóbal Colón, fray Juan Pérez y las autoridades
locales, se dio lectura a la Real Provisión, firmada por los Reyes Católicos,
en la que se ordenaba a ciertos vecinos de la villa palerma poner a disposición
de Colón dos carabelas totalmente armadas y aparejadas.
Real
Provisión de los Reyes Católicos
DIRIGIDA
A CIERTOS VECINOS DE PALOS PARA QUE ENTREGUEN A CRISTÓBAL COLÓN DOS CARABELAS
Granada,
30 de Abril de 1492.
Vien
sabedes como por algunas cosas fechas e cometidas por vosotros en desserbicio
nuestro, por los del nuestro Consejo fuistes condenados a que fuésedes
obligados a nos servir dos meses con dos carabelas armadas a vuestras propias
costas e espensas cada e quando e doquier que por nos vos fuese mandado so
ciertas penas, segund que todo más largamente en la dicha sentencia que contra
vosotros fue dada se contiene. E agora, por quanto nos avemos mandado a
Christoval Colón que vaya con tres carabelas de armada, como nuestro capitán de
las dichas tres carabelas, para ciertas partes de la mar océana sobre algunas
cosas que cunplen a nuestro servicio e nos queremos que llebe consigo las
dichas dos carabelas con que asy nos aveis de servir...
Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO, 295, N.3.
Los
vecinos a los que es referida dicha provisión contestarían:
...
que estaban presto de la cumplir en todo y por todo segund sus Altezas lo
mandan...
Parte trasera de la Real Provisión.
pero
la marinería de la zona, que no era obligada por la real provisión, no estaba
dispuesta a formar parte de la expedición con un desconocido, como lo era Colón
para aquellos hombres. Independientemente de la mayor o menor credibilidad de
las ideas colombinas, los hombres de Palos nunca secundarían al genovés a no
ser que le acompañara algún navegante respetado en la villa. Con la oposición
de los vecinos y de los marineros, Colón recurrió a una de las provisiones
expedidas por los monarcas en la que se le concedió permiso para reclutar
marineros entre los encarcelados, aunque finalmente esto no fue necesario.
Así
mismo, hizo uso de otra real provisión, genérica, dirigida a las villas de las
costas andaluzas:
...
las cibdades e villas e logares de la costa de la mar de Andalucía como de
todos los nros. reynos e Señorios (...) Sabedes que nos habemos mandado a
Christobal Colon que con tres carabelas vaya a ciertas partes de la mar oceana
como nro. capitán (...) por ende nos vos mandamos a todos e a cada uno de vos
en vros. logares e jurisdicciones que cada quel dicho Christobal Colon hobiere
menester...
Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO,
295, N.4.
Con
esta provisión embargó dos barcos en Moguer, en presencia del escribano
moguereño Alonso Pardo, embarcaciones que más tarde serían desechadas.67 En
Palos de la Frontera también realizó embargo de navíos Colón usando la citada
provisión, según testimonio de Hernández Colmeneron. 1 y, según parece, también
lo intentó en la cercana villa de Huelva por lo que se desprende del testimonio
de Pedro Ortiz.n. 2 Pero seguía sin conseguir enrolar a la tripulación
necesaria para la empresa. Los monarcas emitieron entonces, el 20 de junio en
Guadalupe, un poder dirigido a la villa de Palosn. 3 y una comisión a la villa
de Moguern. 4 para que cumplieran las reales provisiones anteriores, la
dirigida a la villa de Palos, y la genérica que usó Colón en Moguer.
En
estas circunstancias, y gracias a la ayuda de los franciscanos del monasterio
de La Rábida y a Pero Vázquez de la Frontera, viejo y respetado marino de la
zona, Colón conoció a Martín Alonso Pinzón,10 rico armador y líder natural de
la zona gracias a sus muchas navegaciones tanto por el Océano Atlántico como
por el Mar Mediterráneo, y por los que había amasado fortuna y fama. Además de
los ánimos y la influencia de estas amistades, al mayor de los hermanos Pinzón
le habría convencido también la propuesta que, según el testimonio de Alonso
Gallego en los Pleitos colombinos, Colón le hizo a Martín Alonso:
Señor
Martín Alonso Pinçón, vamos a este viage que, si salimos con él y Dios nos
descubre tierras, yo os prometo por la Corona Real de partir con vos como un
hermano.
Sea
como fuere Martín Alonso desde aquel momento comenzó una enérgica campaña en
favor de la empresa. Aportó de su hacienda personal medio millón de maravedís,
la tercera parte de los gastos en metálico de la empresa.111213141516171819 y
convence a sus hermanos, Francisco y Vicente, y a los Hermanos Niño, destacada
familia marinera de Moguer, y con los cuales se consigue animar y enrolar a
toda la marinería necesaria para la empresa, hombres de Palos, del vecino
Moguer, de Huelva, del resto de la comarca67 e incluso de fuera de Andalucía.
Marinería que ahora sí se arriesgaba a aquella navegación, ya que el hecho de
que Martín Alonso Pinzón, con sus hermanos y los Hermanos Niño, estuvieran a la
cabeza de dicha armada, era una garantía para los hombres de la zona del
Tinto-Odiel.2021 Gracias a esto el día 23 de junio se abrió la tabla de
enrolamienton. 5 pacíficamente en Palos de la Frontera y se alistó libremente
la marinería necesaria. Es probable qué, tal como afirma el padre Ortega en su
obra,22 no diera tiempo a que en tres días llegase la ejecutoria de los
monarcas, -el poder y la comisión dirigidas a Palos y a la vecina Moguer-,
debido a la distancia a recorrer desde Guadalupe hasta Palos de la Frontera, lo
cual, debido ya a los acontecimientos ocurridos, las haría innecesarias.
Primer viaje
Ultimados
los preparativos la expedición partió del Puerto de Palos, el 3 de agosto de
1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña y la
nao Santa María. La Pinta y La Niña fueron elegidas por los hermanos Pinzón y
costeadas por el concejo de Palos, en cumplimiento de la citada real
provisión.23 La tripulación estaba formada por unos 90 hombres aproximadamente.
La
expedición se dirigió hacia las islas Canarias, donde Colón visitó a Beatriz de
Bobadilla, gobernadora de La Gomera, y además en la Gran Canaria hizo
reparaciones en la Pinta en el timón y en las velas. Finalizadas las
reparaciones, desde la isla de La Gomera continuó su travesía del Atlántico el
6 de septiembre.
La
llegada a América
Llegada a América (1923),
óleo sobre lienzo de Camilo Egas
El
viaje de Cristóbal Colón no resultó fácil para nadie, de hecho hubo conatos de
amotinamiento, pero gracias a la presencia y las dotes de mando de Martín
Alonso Pinzón se consiguieron resolver estas situaciones. Cuando ya se habían
agotado todos los cálculos y previsiones realizadas por Colón, se oyó desde La
Pinta el famoso grito de Rodrigo de Triana «¡Tierra a la vista!», dos horas
después de la medianoche del 12 de octubre.
El
resumen del Diario de Colón cuenta del siguiente modo el momento de la llegada
a la isla de Guanahaní:
Jueves
11 de octubre: A las dos horas después de media noche pareció la tierra de la
cual estarían dos leguas amainaron todas las velas, y quedaron con el treo, que
es la vela grande sin bonetas, y pusiéronse a la corda, temporizando hasta el
día viernes, que llegaron a una islita de los Lucayos, que se llamaba en lengua
de indios Guanahaní. Luego vinieron gente desnuda, y el Almirante salió a
tierra en la barca armada, y Martín Alonso Pinzón y Vicente Yáñez, su hermano,
que era capitán de la Niña. Sacó el Almirante la bandera real y los capitanes
con dos banderas de la Cruz Verde, que llevaba el Almirante en todos los navíos
por seña, con una F y una Y: encima de cada letra su corona, una de un cabo de
la cruz y otra de otro. Puestos en tierra vieron árboles muy verdes y aguas
muchas y frutas de diversas maneras. El Almirante llamó a los dos capitanes y a
los demás que saltaron en tierra, y a Rodrigo de Escobedo, escribano de toda la
Armada, y a Rodrigo Sánchez de Segovia, y dijo que le diesen por fe y
testimonio cómo él por ante todos tomaba, como de hecho tomó, posesión de la
dicha isla por el Rey y por la Reina sus señores, haciendo las protestaciones
que se requerían, como más largo se contiene en los testimonios que allí se
hicieron por escrito. Luego se ajuntó allí mucha gente de la isla.
La
isla estaba habitada por el pueblo lucayo o taíno. El texto arriba citado,
señala la primera oportunidad en la que los europeos utilizaron el término
«indios» para denominar generalizadamente a los pobladores de América, palabra
que deriva del error que cometieron al pensar que la isla Guanahaní se
encontraba en la zona oriental del continente asiático, que los europeos de
entonces confundían con India. En el diario de a bordo, Colón dejó escrita su
primera impresión sobre los nativos que hallaron:
Jueves
11 de octubre: Esto que se sigue son palabras formales del Almirante, en su
libro de su primera navegación y descubrimiento de estas Indias. «Yo -dice él-,
porque nos tuviesen mucha amistad, porque conocí que era gente que mejor se
libraría y convertiría a nuestra Santa Fe con amor que no por fuerza, les di a
algunos de ellos unos bonetes colorados y unas cuentas de vidrio que se ponían
al pescuezo, y otras cosas muchas de poco valor, con que hubieron mucho placer
y quedaron tanto nuestros que era maravilla. Los cuales después venían a las
barcas de los navíos adonde nos estábamos, nadando, y nos traían papagayos e
hilo de algodón en ovillos y azagayas y otras cosas muchas, y nos las trocaban
por otras cosas que nos les dábamos, como cuentecillas de vidrio y cascabeles.
En fin, todo tomaban y daban de aquello que tenían de buena voluntad. Mas me
pareció que era gente muy pobre de todo. Ellos andan todos desnudos como su
madre los parió, y también las mujeres, aunque no vi más de una harto moza. Y
todos los que yo vi eran todos mancebos, que ninguno vi de edad de más de
treinta años: muy bien hechos, de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras: los
cabellos gruesos casi como sedas de cola de caballo, y cortos: los cabellos
traen por encima de las cejas, salvo unos pocos detrás que traen largos, que
jamás cortan. De ellos se pintan de prieto, y ellos son de la color de los
canarios ni negros ni blancos, y de ellos se pintan de blanco, y de ellos de
colorado, y de ellos de lo que hallan, y de ellos se pintan las caras, y de
ellos todo el cuerpo, y de ellos solos los ojos, y de ellos solo el nariz.
Ellos no traen armas ni las conocen, porque les mostré espadas y las tomaban
por el filo y se cortaban con ignorancia. No tienen algún hierro: sus azagayas
son unas varas sin hierro, y algunas de ellas tienen al cabo un diente de pez,
y otras de otras cosas.
Los
taínos habían organizado una sociedad agraria, relativamente avanzada, basada
en el cultivo del maíz, la mandioca y el algodón, incluyendo otros importantes
cultivos como el maní (cacahuete), la pimienta, la piña, la batata y el tabaco.
El propio Colón relató en su diario que cultivaban calabazas y algodón y que
poseían casas y «huertas de árboles».24
Taínos
y españoles intercambiaron productos pacíficamente, pero aquellos no tenían
posesiones de oro, principal producto que buscaban los españoles. Al día
siguiente el Diario comentaba:
Sábado
13 de octubre: Yo estaba atento y trabajaba de saber si avía oro y vide que
algunos de ellos traían un pedaçuelo colgado en un agujero que tienen en la
nariz. Y por señas pude entender que yendo al Sur o Bolviendo la isla por el
Sur, que estaba allí un rey que tenía grandes vasos de ello, y tenía muy mucho.
Colón desembarca en
Guanahani
Sin
embargo, a pesar de la buena relación entre taínos y españoles, Colón ya
pensaba en Guanahaní, en la posibilidad de esclavizarlos:
Domingo
14 de octubre: puédenlos todos llevar a Castilla o tenellos en la misma isla
captivos, porque con cincuenta hombres los ternán a todos sojuzgados y los
harán hazer lo que quisieren.
La
expedición de Colón arribó después a la isla de Cuba, bautizada con el nombre
de Juana, y posteriormente a La Española. El 25 de diciembre encalló la
carabela Santa María y con sus restos mandó construir el Fuerte de La Navidad,
en el que dejó una pequeña guarnición.
El
15 de enero de 1493 Colón tomó la decisión de partir, y el 16 las carabelas
Pinta y Niña abandonaron La Española con rumbo a España. Colón, al mando de la
expedición en La Niña, llevaba varios objetos recogidos en la expedición, y
además le acompañaban 10 indios, dos de ellos hijos del cacique Guacanagari. El
14 de febrero de 1493, en el tornaviaje, se cruzaron con una fuerte tempestad
que estuvo a punto de hacer naufragar las embarcaciones. En tan difícil trance,
Cristóbal Colón realizó el Voto colombino.2325 Los temporales habían separado a
las dos carabelas. Martín Alonso Pinzón con La Pinta consiguió arribar al
puerto de Bayona y, el 15 de marzo, regresó al puerto de Palos. El capitán de
La Pinta desembarcó gravemente enfermo y falleció alrededor del 31 de marzo en
La Rábida. Colón se vio obligado a atracar con La Niña, primero en las islas
Azores, donde Colón es arrestado y liberado posteriormente para, a causa de
otro temporal, terminar atracando en Lisboa el 4 de marzo. Luego regresó al
puerto de Palos el 15 de marzo y, días después, -según es creencia popular- se
encaminaría a Moguer a cumplir el voto que había realizado.23 Posteriormente se
dirigió a Barcelona para informar a los Reyes Católicos de su descubrimiento.
Segundo
viaje
Artículo
principal: Segundo
viaje de Colón
Segundo viaje
El
segundo viaje de Cristóbal Colón zarpó de Cádiz el 24 de septiembre de 1493. La
expedición tenía como finalidad asentar la presencia española en los
territorios descubiertos y encontrar el camino hacia India y Catay. La primera
isla a que arribó fue La Deseada, el 3 de noviembre; después descubrió Puerto
Rico y llegó a La Española, donde encontró destruido el Fuerte de La Navidad
por una ofensiva del cacique Caribe Caonabo. En la misma isla fundó la Villa
Isabela, el 6 de enero de 1494. En su segundo viaje (1493-1496) Colón descubrió
las Pequeñas Antillas (Dominica y Guadalupe), pasó por Puerto Rico (San Juan
Bautista) y llegó a La Española donde encontró el fortín La Navidad destruido.
Muy cerca, fundó su primera ciudad a la que bautizó como La Isabela. Después
exploró Cuba y navegando al sur descubrió Jamaica (Santiago).
Continuó
su viaje de exploración y recorrió las costas de Juana (Cuba) y Santiago
(Jamaica). A fines de 1494 o principios de 1495 se dirigió hacia el sur.
Los
escritos de este viaje registraron algunas situaciones de violencia sexual
contra mujeres indígenas, como la que relató uno de los hombres de su
tripulación.26
Tras
este viaje se dedicó a consolidar el dominio sobre La Española. En 1496 regresó
a España, llegando a Cádiz el 11 de junio.
Tercer
viaje
Artículo
principal: Tercer
viaje de Colón
Tercer viaje
El
tercer viaje de Cristóbal Colón comenzó el 30 de mayo de 1498. Colón partió de
Sanlúcar de Barrameda y llegó a la isla Trinidad a finales del mes de julio.
Del 4 al 12 de agosto visitó el golfo de Paria, en la desembocadura del río
Orinoco, en América del Sur. Denominó a toda esta región Tierra de Gracias, por
la amabilidad de los indígenas. Supuso que había llegado a un continente por la
gran cantidad de agua dulce. Así, por primera vez, se llegaba a Tierra Firme.
En
su tercer viaje (1498-1500) Colón descubrió la isla Trinidad y la desembocadura
del río Orinoco en Venezuela (Tierra de Gracia). Al regresar a La Española lo
tomaron preso por las quejas de los españoles descontentos con su mando.
Regresó encadenado a España, donde la reina Isabel lo liberó.
Ruinas de Nueva Cádiz,
en la costa nororiental de
la isla de Cubagua.
Posteriormente,
recorrió y exploró las tres islas del actual estado de Nueva Esparta, la isla
principal la llamó Asunción, las otras son las actuales Cubagua y Coche. Más
tarde, Cristóbal de la Guerra le cambió el nombre a La Asunción por el de isla
Margarita, por la gran cantidad de perlas que había.
Finalmente
arribó a La Española. En esta isla los españoles se habían sublevado por la
falta de riquezas que supuestamente encontrarían. En una de las negociaciones,
Colón propuso a un grupo de españoles el regreso a Cubagua para el tráfico de
perlas. Se fundó un asentamiento perlífero y más tarde, en 1528, de él nació la
primera ciudad fundada por españoles en continente americano, Nueva Cádiz.27
A
la llegada del administrador real, Francisco de Bobadilla, Colón fue arrestado.
Retornó a España, el 25 de noviembre de 1500, fue puesto en libertad, pero
perdió su prestigio y sus poderes.
Cuarto
viaje
Artículo
principal: Cuarto
viaje de Colón
Cuarto viaje
Pese
a los problemas por la pérdida de sus poderes, Colón inició el cuarto y último
viaje, aunque con una serie de prohibiciones, como la de tocar tierra en La
Española. El objetivo de este viaje era encontrar un estrecho, el Estrecho de
Malaca, que le permitiera llegar a las Indias, al oeste de las islas Antillas,
ya que se veía que éstas no lo eran aunque no podían quedar muy lejos de las
tierras por él descubiertas. Salió del puerto de Cádiz con dos carabelas y dos
navíos: La Capitana, La Gallega, La Vizcaína y el Santiago de Palos, el día 11
de mayo. Pasando por Canarias, llegó a las Indias en 30 días.28
Estrecho de Malaca. Este
estrecho era el que buscaba Colón
en su cuarto viaje, creía que
había llegado a Asia, y
lo necesitaba para llegar
a las Indias.
En
su cuarto viaje (1502-1504) Colón exploró las costas de América Central
(Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá).
Por
los problemas surgidos en La Española, Nicolás de Ovando, nuevo gobernador de
la colonia, no permitió que Colón desembarcase a pesar de una inminente
tempestad y que cambiase uno de sus buques por otro de mejores condiciones.
Colón capeó como pudo el temporal y pasó a Jamaica, aunque la tormenta no le
dejó hasta el 12 de septiembre, 88 días de tormenta.29
Siguiendo
al oeste, descubriendo la isla de Guanaja, en la costa de Honduras, en América
Central, encontró una embarcación con mercaderes mayas que le ofrecieron cacao.
En la Punta Cajina (hoy Punta Trujillo) los tripulantes descendieron de sus
naves para asistir a la primera misa católica celebrada en la tierra firme de
América el 14 de agosto30 Continuó al este y lo sorprendió un huracán, durante
varias semanas las 4 naves fueron sacudidas por la tormenta y el 12 de
septiembre doblaron un cabo. Allí se calmó la tormenta y Colón lo bautizó como
Cabo Gracias a Dios, en la costa de Honduras, por decir «Gracias a Dios que al
fin salimos de esas honduras» y de allí navegó hacia el sur.3132
Varias
expediciones siguieron a los cuatro viajes colombinos. Fueron los Viajes
Menores, los cuales permitieron reconocer la existencia del continente
Americano y explorar toda la costa de Venezuela.
Los
viajes menores o andaluces
En
1499 la corona española decidió poner fin al monopolio que tenía Colón sobre
las navegaciones a las Indias y abrió el negocio a otros navegantes y
empresarios. Esto dio lugar a la realización de una serie de expediciones
denominadas «viajes menores», «viajes de reconocimiento y rescate» o también
«viajes andaluces», ya que todos se organizaron y partieron desde Andalucía y
los que participaron en ellos residían mayoritariamente en esa región de
España.
Entre
los muchos marinos se destacaron: Pedro Alonso Niño, descubridor de las costas
de golfo de Paria, en Venezuela; Andrés Niño, descubridor de las costas
centroamericanas; Bartolomé Ruiz, descubridor y navegante del Océano Pacífico
que integró como piloto la famosa expedición de Francisco Pizarro de los Trece
de la Fama; fray Antonio de Olivares, fundador de la ciudad de San Antonio de
Texas; Alonso Vélez de Mendoza, repoblador de la isla de Santo Domingo; Diego
García de Moguer que tomó parte en el primer viaje alrededor del mundo junto a
Magallanes; Juan Ladrillero, considerado el otro descubridor del Estrecho de
Magallanes y Vicente Yáñez Pinzón, descubridor del Brasil,3435 Juan Rodríguez
Mafra que participó como piloto de la Nao San Antonio en el viaje de la primera
vuelta al mundo.
Consecuencias
Mapa de Martin Waldseemüller
de 1507, el primero en incluir
el topónimo «América».
La
llegada de Cristóbal Colón a América está considerada como uno de los hechos
más importantes de la historia universal por las consecuencias que tuvo y debe
relacionarse con el primer viaje alrededor del mundo realizado por la
tripulación de Fernando de Magallanes pocos años después, que abrió paso a los
viajes de exploración y conquista europeos.
Consecuencias
a largo plazo
Artículos
principales:
Colonización europea de América y Colonización española de América.
Américo Vespucci despierta «America»,
grabado del 1638
La
llegada de Cristóbal Colón permitió el comienzo de la conquista de América,
cuya primera campaña fue la que los españoles emprendieron en Cuba, por
Velázquez. A ella siguieron las dos más importantes: la del Imperio azteca, por
Hernán Cortés y la del Imperio inca (por Francisco Pizarro) así como otras
hasta su finalización definitiva tras los decretos del rey Felipe II de abolición
de la conquista. A partir de ellos comenzó la «colonización de América», en la
que intervinieron también portugueses, ingleses, holandeses y franceses.
El
contagio de las enfermedades que los europeos llevaron consigo (viruela, tifus,
fiebre amarilla, etc.) produjo un colapso de la población indígena de América,
con gran impacto en la mortandad. Igualmente vinieron enfermedades de las
Américas como la en su día temida sífilis que diezmó la población europea desde
las posesiones españolas en Italia en 1494.
Si
bien todas las potencias europeas impusieron obligatoriamente sus idiomas en
sus respectivos territorios, debido a la hegemonía que sobre América ejercieron
España y Portugal predominaron el idioma español y portugués en sus respectivas
zonas de influencia. España, empero, permitió la utilización de varios idiomas
indios como el quechua y el guaraní. Por su parte la religión católica pasó a
ser oficial y la conversión de los indígenas fue una de las causas de la
conquista; además se generó una población con altos niveles de mestizaje
genético y cultural entre los pueblos originarios, los europeos y los africanos
subsaharianos.
La
principal riqueza generada por los territorios españoles en América fue la
extracción del oro y la plata. Inicialmente los españoles encontraron sobre
todo oro, y las cantidades enviadas a España fueron pequeñas: hasta 1514
llegaron unos 40 000 o 50 000 pesos anuales desde la Española, otros 11 000
desde San Juan y cantidades menores desde Cuba y Tierra Firme.37 La conquista
de los imperios azteca e inca deparó puntualmente grandes botines de oro. Sin
embargo fue la puesta en explotación de minas de plata en México y, sobre todo,
en Potosí a partir de 1545 lo que multiplicó la producción y exportación de
metales preciosos. Se ha calculado que hasta 1660 se enviaron a España unas 16
600 toneladas de plata y 181 toneladas de oro, incluyendo tanto las remesas de
particulares como los impuestos a la Corona. Esto desató una revolución de
precios en Europa y permitió a la Monarquía Hispánica financiar las numerosas
guerras en que se vio envuelta.3839 No obstante, la mayor parte de la plata y
del oro, en torno al 80 %, se quedó en la América española.40
Otra
importante consecuencia de la llegada de los europeos a América fue la asimilación
y la difusión mundial de los alimentos que habían sido consumidos por las
culturas americanas y que hoy se estima constituyen el 75 % de base alimentaria
que consume la Humanidad. Ellos son el maíz, la batata, la calabaza, el tomate,
el chocolate, el cacahuate o maní, la vainilla, los ajíes, la palta o aguacate,
todos estos originarios de Mesoamérica, con justa razón nombrada por los
conquistadores «el cuerno de la abundancia», y la papa (o patata como se
denomina en España) originaria de los pueblos nativos de los Andes. Otros
productos importantes originarios de América son la goma y el tabaco.41
Por
otro lado, los españoles primero y los europeos después llevaron consigo a
América animales tan útiles como el caballo, el burro, el asno y demás ganado
como la vaca castellana, el buey, la oveja y animales de granja como el cerdo,
la gallina/gallo, el conejo... Así como ciertos árboles frutales, la cebada, la
avena, el centeno y el trigo de la península ibérica y la caña de azúcar de la
islas Canarias o Madeira, que tanto éxito tuvo en el Caribe o el mismísimo café
de las colonias portuguesas en África.42
La
llegada de Colón a América causó también una gran expansión de la navegación y
el comercio entre los pueblos, que se volvió mundial.
Los
colonos ingleses en América terminaron organizando a partir de 1776 un nuevo
tipo de sociedad a partir de conceptos novedosos como independencia,
constitución, federalismo y dieron origen a los Estados Unidos de América que,
en el siglo XX, reemplazó a Gran Bretaña como potencia mundial dominante.
No
todo fue horror: sobre las ruinas del mundo precolombino los españoles y los
portugueses levantaron una construcción histórica grandiosa que, en sus grandes
trazos, todavía está en pie. Unieron a muchos pueblos que hablaban lenguas
diferentes, adoraban dioses distintos, guerreaban entre ellos o se desconocían.
Los unieron a través de leyes e instituciones jurídicas y políticas pero, sobre
todo, por la lengua, la cultura y la religión. Sí las pérdidas fueron enormes,
las ganancias han sido inmensas.
Para
juzgar con equidad la obra de los españoles en México hay que subrayar que sin
ellos ―quiero decir: sin la religión católica y la cultura que implantaron en
nuestro país― no seríamos lo que somos. Seríamos, probablemente, un conjunto de
pueblos divididos por creencias, lenguas y culturas distintas.
Octavio Paz, 1995
El
debate terminológico
La
expresión «descubrimiento de América» para referirse a la llegada de Cristóbal
Colón al continente americano es criticada por diversos sectores, culturas y
estudiosos, dando lugar a un amplio y apasionado debate. Esta confrontación ha
estado íntimamente vinculada al uso de los términos Día de la Raza, Día de la
Hispanidad, Día de la Resistencia Indígena y otros creados para referirse al
mismo suceso. El debate se generalizó en 1992, con ocasión del V centenario de
la llegada de Colón a América.
El
filósofo argentino Santiago Kovadloff dijo a este respecto:
Se
aproxima un nuevo 12 de octubre y aún perduran los ecos de la polémica desatada
en 1992. Al cumplirse los quinientos años de la llegada de los españoles a
América estalló la discusión, hasta allí quizá menos estridente pero no menos
apasionada. ¿Cómo debía designarse lo sucedido? ¿Descubrimiento? ¿Encuentro de
culturas? ¿Usurpación? ¿Conquista? Una gama de posibilidades e imposibilidades
interpretativas se viene desplegando con fervor desde entonces hasta hoy. El
desacuerdo alentó confrontaciones interminables. Si la trascendencia del
acontecimiento evocado resulta indiscutible, su caracterización, por uno u otro
motivo insatisfactoria, prueba la dificultad para generar consenso donde tanta
falta hace. Después de todo, si cabe a los nombres, como enseña Aristóteles,
enunciar las propiedades de las cosas, la desorientación para lograr
convergencias en esta materia evidencia que, aún ahora, aquellos a quienes la
cuestión compete siguen hablando de cosas distintas.
Se
han desarrollado diversas posiciones sobre la manera de denominar el
acontecimiento:
·
Postura tradicional: es la postura mayoritaria, que
se ha usado desde fines del siglo XVI, primero en la cultura occidental y luego
se ha extendido en todo el mundo, que utiliza el término «descubrimiento de
América», para referirse exclusivamente al acto realizado por Colón el 12 de
octubre de 1492, al llegar a la isla Guanahaní conduciendo la expedición
española embarcada en las famosas tres carabelas, en su primer viaje. La
postura tradicional tiene su origen en el «mito del piloto original» ya
presente en los testimonios del padre Bartolomé de las Casas, luego modificado por
Fernando Colón en la biografía de su padre, Vida del almirante, publicada en
1571 (ver O’Gorman).
·
Postura tradicional ampliada: sin abandonar la
postura tradicional, discute el alcance original, y sostiene que el término
debe extenderse a todos los viajes de Colón a América, o sea, a sus cuatro
viajes ya que entiende el término «descubrimiento de América» no como un acto
sino como una etapa, la primera de la expansión ultramarina de Europa, sucedida
luego por otras dos etapas: la conquista y la colonización.
·
Postura tradicional modificada: sostiene que es
incorrecto aplicar el término «descubrimiento de América» a ninguno de los
actos realizados por Colón y sus hombres, y que dicha denominación debe
reservarse al momento que el primer europeo «descubrió» que Colón había llegado
a tierras desconocidas hasta entonces para las culturas europeas, africanas,
asiáticas y polinésicas del siglo XV. Este momento también se encuentra
discutido, pero existe cierto consenso en atribuírselo al italiano Américo
Vespucio a partir de cuyo nombre los europeos denominaron «América» a ese
continente.
·
Postura cronológica: sostiene que el término
«descubrimiento», a secas, o «primer descubrimiento», debe ser reservado para
el primer ser humano en realizarlo, y en el caso en debate, para los primeros
seres humanos en poblar el continente americano y es la utilizada por algunos
arqueólogos, antropólogos e historiadores, como por ejemplo William Dancey (de
la Universidad de Ohio).45 y que admite denominaciones sucesivas como «primer
descubrimiento», «segundo descubrimiento», «tercer descubrimiento», «cuarto
descubrimiento», de América, para referirse a las llegadas de los primeros
seres humanos, y luego de los inuit, vikingos/europeos y españoles/europeos,
respectivamente.
·
Postura cronológica modificada europea vikinga:
rechaza la aplicación del término «descubrimiento de América» para la llegada
de Colón porque sostiene que los primeros europeos en llegar a América fueron
los vikingos, debiendo aplicarse el término a la llegada a América de Leif
Eriksson en 985 (ca.).
·
Postura cronológica modificada europea moderna:
sostiene que hubo otros europeos modernos que descubrieron América antes de la
llegada de Colón, como la hipótesis de Alonso Sánchez de Huelva.
·
Postura cronológica modificada no europea: sostiene
que antes que ningún pueblo europeo hubo otros pueblos no europeos en llegar a
América luego de los siberianos e inuit. Los casos varían entre chinos,
polinésicos, fenicios, egipcios, mandingos y marroquís.
·
Postura etnológica: sostiene que puede considerarse
«descubrimiento» al realizado por cada cultura o etnia en condiciones de
aislamiento. De este modo tanto la llegada original de los siberianos a América
y en algún momento de otras etnias, como las posteriores de los inuit, los vikingos
y los españoles, significaron un «descubrimiento» para cada una de esas etnias
o culturas. En este caso, propone adicionar al término «descubrimiento» la
etnia o cultura para la que es significativa, hablando de «descubrimiento de
América por los vikingos» o «descubrimiento de América por los europeos
medievales», etc.n. 7 Un ejemplo de esta postura es el libro The American
Discovery of Europe (El descubrimiento americano de Europa), de Jack D. Forbes,
2006. Esta postura abrió camino también al concepto de «descubrimiento de
Europa» por parte de las culturas indígenas, cuya existencia también
desconocían, concepto que utilizan algunos historiadores como Daniel Richter
(Universidad de Pensilvania, en Native American Discoveries of Europe) o el
Estado de Chile que denomina al 12 de octubre como Día del Descubrimiento de
Dos Mundos.
·
Postura pluralista: acepta que para diversos grupos
sociales, étnicos, lingüísticos y culturales, el término «descubrimiento de
América» tiene múltiples acepciones, sin tomar partido por ninguna.
·
Postura indigenista/anticolonialista: es sostenida
por varios pueblos indígenas americanos que cuestionan el término
«descubrimiento de América» por considerarlo una denominación eurocéntrica, que
ignora la presencia de sus antepasados en América al momento de la llegada de
los españoles, dando prioridad a la idea de América como «tierras» antes que
como pueblos, con el fin de legitimar culturalmente la posterior dominación y
colonización de la que fueron objeto. Con esta postura coinciden los sectores
opuestos al colonialismo y al neocolonialismo para quienes el término es una
expresión de colonialismo cultural. En general han propuesto términos
alternativos como «invasión de América», o «Día de la Resistencia», entre
otros.
·
Postura hispanista: rechaza como acto de
«indigenismo» (en sentido peyorativo) y considera un ataque contra la
Hispanidad, todo cuestionamiento al término «descubrimiento de América» que no
signifique llegada de los españoles a América con Colón. Para esta postura el
término y el hecho que expresa, está vinculado a la superioridad de la cultura
hispana, occidental y cristiana, sobre las demás. Estuvo originalmente
vinculada a la invención en 1915 del controvertido «Día de la Raza» como Día de
la Hispanidad y de la Raza Española, para el 12 de octubre, aunque luego varios
países atemperaron su significado para relacionarlo con una supuesta raza
mestiza. Fue difundida intensamente por algunos gobiernos latinoamericanos en
los años setenta.
·
Postura conciliatoria: propone conciliar las
posturas indigenista/anticolonialista con la hispanista, sosteniendo que antes
que poner el acento en la mayor o menor violencia que pudiera haber
caracterizado la llegada de los españoles a América, lo que se debe destacar es
el hecho del encuentro entre dos grupos de culturas humanas que habían vivido
separados por milenios. Propone denominar «Encuentro de Dos Mundos» o
«Encuentro de Dos Culturas», al hecho de la llegada de Colón a América.47
·
Posturas nacionales: estas posturas han comenzado a
aparecer como posturas oficiales frente al 12 de octubre de 1492 y su
denominación, en muchos casos rechazando o limitando la denominación
«descubrimiento de América». En Argentina, por ejemplo, para el INADI
(Instituto Nacional contra la Discriminación) «la idea de descubrimiento y el
elogio de la conquista española» es violatoria de la Convención sobre
Eliminación de toda Forma de Discriminación Racial y constituye un acto de
discriminación.48
Conmemoraciones
del descubrimiento
Hasta
el siglo XIX la efeméride del descubrimiento pasó relativamente desapercibida.
La primera gran celebración oficial internacional tuvo lugar en 1892, con la
Celebración del IV Centenario del Descubrimiento de América.
Un
siglo más tarde, en 1992, tuvo lugar la Celebración del V Centenario del
Descubrimiento de América concentrando gran número de actos conmemorativos y
debates sobre el significado y consecuencias del acontecimiento. España
organizó la Exposición Universal de Sevilla, que coincidió en el tiempo con la
celebración de las Olimpiadas de Barcelona. Los Lugares colombinos
protagonizaron actuaciones de restauración en sus principales monumentos y se
hizo un viaje repitiendo el primer viaje de Cristóbal Colón a América con
réplicas de los navíos originales (la Pinta, la Niña y la Santa María)
construidos en los astilleros de ribera españoles de Isla Cristina, Cartagena y
Barcelona respectivamente, con métodos artesanales.
En
el año 2017 se desarrollaron las celebraciones del 525.º aniversario del
Descubrimiento de América. Para tal fin, la Diputación de Huelva organizó una
Comisión49 encargada del desarrollo de actividades culturales, deportivas,
académicas, turísticas, institucionales y de sensibilización ciudadana, bajo la
denominación de 525 aniversario del encuentro entre dos mundos. En los Lugares
colombinos las celebraciones locales se denominan 525 Aniversario del
Descubrimiento de América y contempló multitud de actos conmemorativos,
rememorando la participación clave de Palos de la Frontera, su monasterio de La
Rábida y Moguer en el Descubrimiento de América.
Miscelánea:
viajeros y asentamientos anteriores a Colón
Artículo
principal: Contactos
transoceánicos precolombinos
Las
dos únicas evidencias firme de asentamientos son la encontrada de los vikingos,
y la de las poblaciones del norte de Siberia; las teorías de arribo de
polinesios cuentan con cierto consenso científico, pero son más disputadas por
carecer de vestigios arqueológicos directos50 y estar basadas en pruebas
indirectas de difícil datación, como la difusión de alimentos51 o de culturas
materiales.52 Los vikingos se establecieron temporalmente en Groenlandia en los
siglos X y XI,53 y desde allí exploraron la costa atlántica norte de América,
fundando el asentamiento vikingo de L'Anse aux Meadows, en Terranova.5455 Este
asentamiento fue establecido en el año 1021,5657 y suele identificarse con la
Vinlandia descrita en las sagas nórdicas.58 El asentamiento fue abandonado unos
diez años después de su fundación sin aparente repercusión en las poblaciones locales.5960
Las poblaciones indígenas de Siberia y Alaska participaron de un cierto
intercambio comercial a través del estrecho de Bering,61 intercambiaban objetos
de bronce,62 obsidiana,61 y metales63 que han sido hallados en excavaciones
arqueológicas en Alaska posiblemente relacionadas con poblaciones ancestrales
inuit.64 Finalmente, en la costa del Pacífico, se ha sugerido que ciertas
evidencias materiales6566 y genéticas,6768 en ambos casos
disputadas,505152697071 podrían apuntar a que pequeños grupos de navegantes
malayo-polinesios pudieron arribar a las costas del Pacífico de América del Sur
antes de la llegada de Colón.727374 Ninguno de estos grupos tuvieron un impacto
permanente, por lo que no suelen considerarse como parte de un «descubrimiento»
consciente de una civilización por parte de otra civilización.
El
resto de teorías de contactos precolombinos son altamente especulativas, y
carecen de consenso científico.7576 Se ha especulado con un posible origen
africano del pueblo olmeca,7778 hipótesis de origen racista7980 basada en los
supuestos rasgos «negroides» de algunas esculturas olmecas,79 y que
posteriormente fue abrazada por ciertas corrientes afrocentristas.81 Las
pruebas genéticas han demostrado que las poblaciones olmecas no están relacionadas
con las poblaciones africanas,82 y las supuestas evidencias antropológicas han
sido descritas como basadas en «juicios superficiales y conclusiones
erróneas.»83 También se ha especulado con contactos precolombinos por parte de
navegantes o exploradores chinos,8485 japoneses,8687 indios,88 fenicios,89
egipcios,90 romanos,91 celtas,92 judíos,,93 árabes9495 y viajeros africanos del
imperio de Malí.96 Ninguna de estas hipótesis cuenta con consenso científico, y
suelen ser consideradas como pseudoarqueología y pseudohistoria.
https://es.wikipedia.org/wiki/Descubrimiento_de_Am%C3%A9rica
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